SOBRE LOS GÉNEROS
“Las
consideraciones sobre los géneros, disecan las obras, las encierran en
compartimentos, fabricando así, modelos rígidos y conminatorios... La noción de
género no sirve para nada. En primer lugar porque todas las grandes obras tienden a destruir
(trasgredir) la caparazón del modelo de género, y es precisamente la disidencia
respecto a lo preexistente, un síntoma de valor.”
“Y porque,
cuando se pretende que una gran obra
funda un género y actúa así como un gendarme
de las obras futuras, obligándolas a adecuarse al modelo, se tergiversa
completamente su carácter y su propia razón de ser que es justamente la de abrir perspectivas
nuevas y no la de restringir el campo de
significaciones posibles, al obligar a las obras que vendrán, a transitar
determinados caminos, so pena de excomunión”
(Tomado de: Raúl Beceyro. Sobre la fotografía. Edit.
Equinocio (USB). Caracas. 1979. Pgs. 75-76)
Sobre los
géneros literarios, en la Gran Enciclopedia Espasa, encontramos: “Género
Literario se refiere a csada una de las categorías o clses en que se pueden
ordenar las obras literarias. Tradicionalmente
se distinguen tres géneros mayores denominados: Lírica, Épica y Drama,
pero a pesar de la continua evolución de
la teoría de los géneros, y de los vaivenes, que han llegado incluso a negar su
existencia, persiste el concepto de género literario a través de la historia
(...) La hibridación quizá entorpezca el estudio crítico de una obra y su
adscripción a un género concreto, pero sin duda es fuente de riqueza y ha hecho
crecer la historia de la literatura...”
En
realidad no podemos confundir un ensayo con una novela, un cuento o un
poemario. Hasta ahora el único género que puede contener a los demás géneros es
la novela porque en una novela se pueden incluir ensayo (reflexiones,
opiniones), relatos interconectados, poesía y hasta drama, permitiendo siempre
al escritor total libertad para construir su obra, guardando siempre la
ineludible coherencia básica.
*******
Otras recomendaciones:
-Seducción, Placer y Goce:
Busca
tu propio placer al escribir, de lo contrario la escritura resultará forzada,
ripiosa y sobre todo, aburrida. Si el escritor se encuentra seducido por la
escritura, transmitirá su propio placer
al lector. En lo que respecta al
“goce”, el cual, según Roland Barthes, “irrita y perturba al lector”, tenemos que al reflexionar sobre lo leído, en
un proceso natural de “rebote”, de “regurguitación”, ese mismo lector reconocerá el valor de lo
que en un primer momento tanto le había
incomodado.
-Inmanencia y Pertinencia:
La inmanencia y la pertinencia,
como dos leyes inviolables del tan injustamente calumniado estructuralismo,
resultan imprescindibles para todo tipo de escritura, aunque en algunos casos
como en la novela de situaciones, de fusión de géneros o en la novela
fragmentaria (construída mediante fragmentos encadenados e
interconectados), modalidades practicadas en los tiempos más recientes, estas
leyes podrían ser trasgredidas sin afectar la coherencia básica de la escritura.
-¿Cómo escribir?:
Por
capas de escritura, como si se tratara de pintar un mueble: una primera
versión, espontánea; una segunda versión, revisada y corregida; una tercera
versión con los ajustes imprescindibles y después, tantas lecturas, revisiones
y correcciones como sean necesarias hasta que consideres que la obra está
concluida porque ya no lo puedes hacer mejor. De lo contrario, la escritura
también podría convertirse en un proceso
interminable de revisiones y correcciones, porque siempre habrá algo por
cambiar o corregir y nunca lograremos la obra perfecta...
Finalmente, narrar es como
desenredar las hebras de un ovillo y
mediante la memoria y la imaginación, sin patrón previo, tejer un tapiz. Como
se vayan enredando los hilos, se va desenvolviendo la narración y así mismo las
historias, al igual que la estructura, se van construyendo solas.
Las ideas, como los recuerdos, una
vez ficcionalizados y convertidos en
narración, son como las piedras en bruto de una cantera que una vez talladas y
pulidas se convierten en los diversos módulos narrativos que van integrando
los cuentos y novelas...
*******
NOTA: Tomado de: Antonieta Madrid. “Del
Cuaderno de Notas. Apuntes para un Taller”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario